Cielo Nuevo, Tierra Nueva (Shincheonji)
Referencia Principal : Ap 21, Ap 6-7
¿A qué se refiere cuando se dice cielo nuevo, tierra nueva? Se refiere a los hechos que muestra cómo una era de la iglesia de Cristo termina como en Apocalipsis capítulo 6 y una era nueva, como en Apocalipsis capítulo 7 se crea otra vez. Es similar a los tiempos de Adán y Noé, Los tiempos de Canaán, descendientes de Noé y los tiempos de los Israelitas Físicos de Moisés y los tiempos del Israel Físico y la primera venida de Jesús. Y finalmente es similar a cómo el Israel Espiritual añeja y corrupta termina como en Apocalipsis capítulo 6 y la Nueva Israel Espiritual se crea como en Apocalipsis capítulo 7. Esto se ve en Apocalipsis capítulo 21 cuando se dice: Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más.” Al resumir en letras chinas (hanja) el cielo nuevo y la tierra nueva, aparece la palabra Shincheonji.
Tal como mencionamos antes, Shincheonji se refiere al cielo nuevo y la tierra nueva que se crea tal y como está descrito en Apocalipsis 7 después de que el primer cielo y la primera tierra, Seonchonji, desaparecen. ¿Cómo es que el mundo conocerá estos hechos? Hace dos mil años, después de que Jesús ascendió a los cielos, le mostró a su discípulo Juan los acontecimientos del futuro, la promesa del Apocalipsis a través de visiones.
La desaparición del primer cielo y la primera tierra ocurre porque se han corrompido y han apostatado. Tal como en Apocalipsis 2, 3 y Apocalipsis 13, como han recibido la marca del pastor del diablo en la frente y la mano y adoraron al pastor del diablo que es como la bestia ¿cómo no se puede considerar apostasía? Estas acciones son similares a Adán y Eva cuando apostataron contra Dios al escuchar las palabras de la serpiente y estas acciones son iguales a las de los pastores del templo de Jerusalén y los miembros de su congregación en los tiempos de la primera venida de Jesús. Todo ésto no es un sueño, sino la realidad de hoy en día. ¿Será que todos los creyentes del mundo tienen palabra? ¿Si no la tienen, cuál es la razón? La razón es que los pastores no tienen palabra. Las escuelas teológicas no tienen palabra y por ello no pueden enseñar a los pastores.
En Apocalipsis 22:18-19 está escrita la advertencia que si se añade o quita al Apocalipsis, no se podrá ir al reino de los cielos y recibirá maldiciones (plagas). No hay nadie que se preocupa o conozca verdaderamente el Apocalipsis. ¿Entonces habrá salvación? Tal y como está escrito en Apocalipsis capítulo 10, debemos aprender del pastor que recibe la revelación para conocer el significado y el cumplimiento de Apocalipsis. ¿No son estas palabras un hecho?
Las personas mueren si no se alimentan físicamente. Al igual, nuestros espíritus mueren si no comemos del alimento espiritual. Lo espiritual es la profecía y las realidades actuales de su cumplimiento.
El pastor prometido del Apocalipsis, el vencedor (ver Ap 2, 3) trae consigo el alimento de vida eterna para sanar y resucitar a los espíritus que se resecan y se marchitan. Buscarlo y comer del alimento que tiene es recibir y comer el maná, el alimento de vida eterna.
Tal como está escrito en Jeremías capítulo 31, Dios vino a Jesús como está prometido y cumplió la profecía de la siembra de la semilla (Mt 13:24-25). Tal como Jesús prometió, diciendo que volvería en el tiempo de la cosecha (Mt 13:30, 24:29-31) y en Apocalipsis capítulo 14, tal y como está prometido vino a cosechar y las personas cosechadas son selladas tal como está en Apocalipsis 7 y son establecidas como el nuevo reino y nuevo pueblo de Dios. Este reino es el cielo nuevo y la nueva tierra que se promete en Apocalipsis capítulo 21.
El cielo nuevo se refiere al nuevo tabernáculo (ver Ap 15:5,Gn 37:9-11) y la tierra nueva se refiere a los cuerpos físicos nuevos, es decir las personas nuevas. Lo antiguo termina (Ap 6:12-14) y ahora es tiempo de lo nuevo.
Aunque digamos que hemos venido a Shincheonji, que nos hemos sellado, que hayamos escritos nuestros nombres en el libro de la vida, si no podemos guardar la palabra y nuestra fe, nuestros nombres en el libro de la vida se tachan y se borran. También debemos guardar en nuestros corazones el hecho que hay postreros que serán primeros y primeros que serán postreros (Lc13:29-30).
Llega el día cuando cada una de las personas recibirá juicio en frente de Dios. En este día recibirán juicio de acuerdo a lo que está escrito en la Biblia, según sus obras y se decidirá si van al cielo o al infierno (Ap 20:12).
La iglesia es el lugar donde se enseña y aprende sobre la palabra de Dios. Sin embargo, si en la iglesia se enseña sobre las cosas del mundo, ese pastor es del mundo y no puede ser de Dios. La iglesia y el pastor del verdadero Dios son el pastor y el templo de Apocalipsis 10 y 15. En este lugar, el pastor recibe la revelación del cielo y es el pastor que enseña esta revelación. El templo es el templo del tabernáculo del testimonio donde se testifica sobre los hechos de la revelación. Ese lugar es el lugar en frente del trono de Dios, el lugar donde están las personas que pelearon y vencieron contra el grupo del dragón en Apocalipsis capítulo 12. Es también el lugar donde las naciones del mundo vendrán para adorar (Ap 15:2-5).
¿Por qué es que no creen? ¿Por qué es que no conocen la palabra de la promesa? Si aún no creen, ¿podrán ser ortodoxos? ¿Será que podrán entrar al reino de los cielos? ¿No son pastores falsos aquellos que continúan enseñando que se irá al reino de los cielos?
Aquellas personas a las que no se cumple en ellos las promesas del Nuevo Testamento, el Apocalipsis, no podrán entrar al reino de los cielos. La Biblia testifica sobre éste hecho.
En los tiempos de la primera venida de Jesús, el diablo entró dentro de los pastores del templo de Jerusalén, y los miembros de su congregación creyeron en las mentiras de estos pastores del diablo e incluso persiguieron a Jesús. ¿No será igual hoy en día, con el pastor y los creyentes dentro del país donde se cumple el Apocalipsis?¿Aún viendo estos hechos no lo saben? Se conoce al árbol a través de su fruto.
La persecución ocurre porque uno cree más en la persona (pastor) que en la palabra (Dios). Hasta llaman al cielo nuevo y la tierra nueva “heresía, diabólico.” Entonces es como decir que Dios, Jesús y Juan, quienes prometieron el cielo nuevo y la tierra nueva, son el diablo y son heresía. Hablan así, porque a diferencia de ellos que están corrompidos y son de antes, el cielo nuevo y la tierra nueva son nuevo.
A través de Pablo, Dios dijo que sus hijos son aquellos que salen del lugar de la corrupción y se apartan. Dios promete estar junto a ellos (2Co 6:14-18). Shincheonji es el lugar donde se realiza esta palabra. Las personas que no creen en Dios, ni su palabra ni en las cosas nuevas, ¿de la semilla de quién habrán nacido? Ellos nacieron de la semilla del diablo. Nosotros hemos nacido de la semilla de Dios. Y por ello nosotros creemos.
Las promesas de Dios comenzaron desde los tiempos de los profetas del Antiguo Testamento y continuaron hasta hoy en el tiempo del cumplimiento del Apocalipsis. Sin embargo, las personas corrompidas, ni una de ellas, conocen estos hechos y las personas que renacen, reciben la revelación conocerán el cumplimiento de estos hechos. Si no saben el significad de las profecías, cómo podrán ver y conocer las entidades reales del cumplimiento? Sin embargo, las personas que renacieron, nosotros, sí sabemos. Jesús dijo: “ahora os lo he dicho antes que suceda, para que cuando suceda, creáis” (Jn 14:29). Los ciegos y sordos no podrán saber, ni conocer.
El Apocalipsis es la última obra de Dios, y el objetivo que desea llevar a cabo es la creación del cielo nuevo y la tierra nueva, Shincheonji. ¿Podrán ir al cielo, aún cuando insultan a Shincheonji?
Shincheonji va al campo donde se sembró la semilla y como ladrones cosechan (Mt 24장, 1Ts 5:2, Ap 17:14, 18:4). Se establece el reino de Dios, las 12 tribus, sellando a las 144 mil. Luego, se crea a la multidud vestida en blanco que viene de todas las naciones (Ap 7, 14). Este es el objetivo de esta obra.
Los que persiguen a este reino lo hacen porque pertenecen al diablo. En poco tiempo, el diablo también llegará a su fin (ver Ap 20:1-3). Y se realizará la era del reinado de Dios.
Si vieron la promulgación de la ley internacional y la Alianza Mundial entre Religiones, sabrán en qué era estamos y sabrán que ha llegado el tiempo del reinado y la obra de Dios.
Usen la palabra de revelación de la Biblia como un camino y sepan que venir al cielo nuevo y la tierra nueva es el camino hacia al reino de los cielos, la salvación. Este es el lugar donde se cumple la palabra escrita en Ap 3:12. ¡Amén!
Referencia: http://cafe.daum.net/scjschool/E3qZ/662
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