Vida de fe que Dios reconoce y la vida de fe que Dios no reconoce

Vida de fe que Dios reconoce y la vida de fe que Dios no reconoce

Referencia principal: Mt 7:21-27 (Jn 12:48, Ap 20:12-15)

Después de la transgresión de Adán, Dios el Creador ha trabajado por largos 6,000 años para restaurar la vida de la humanidad que ha caído al pecado. Este testimonio está escrito en los 66 libros en la Biblia. El trabajo de Dios durante los tiempos de Noé, durante la primera venida de Jesús, y la segunda venida es el trabajo de la restauración. Entre esto, el trabajo de la restauración que se ha tomado acabo antes de los tiempos de Jesús y el trabajo de la restauración que se toma acabo después de los tiempos de Jesús son diferentes.

Con las enseñanzas de sus tiempos, las personas que existían antes de Jesús no pudieron completamente saber acerca del Creador o creer en Él, como lo hemos visto en Jeremías 31 y Juan 1:9-13. Después de Jesús, hijos fueron nacidos no de la descendencia humana, o la decisión del hombre, pero nacidos de Dios. Los quienes son nacidos de Dios después de que Jesús completamente sabe Dios y cree en Él.

Nacer de Dios es ser nacido por la semilla de Dios (Lc 8:11). Jesús siembra esta semilla de acuerdo de las promesas del Antiguo Testamento (Jr 31:27, Mt 13:24-25), y esta semilla fue el misterio del reino de los cielos (Mt13:10-11). Los quienes son nacidos de esta semilla son los hijos del reino (Mt 13:37-39), los hijos de Dios nacidos de Dios.

Las personas antes de Jesus fueron pecadores nacidos con la línea hereditaria de Adán la transgresión por la semilla de la carne, pero es cierto que después de Jesús, personas se convirtieron en los hijos de Dios que volvieron a nacer de la semilla de Dios. La diferencia entre los quienes son nacidos de la semilla del hombre (nacidos de la descendencia natural) y los quienes fueron nacidos por la semilla de Dios es grande.

Empezando desde la era del Nuevo Testamento, una persona debe de ser nacida solamente por la semilla de Dios para ser calificados para llamarlo, “Padre.” Cuando la descendencia de Abraham (Judíos) llamaron a Dios como su padre en Juan 8, Jesús les dijo que su padre es el demonio, no Dios (Jn 8:37-44). Esta es la diferencia entre los quienes son nacidos de Dios y los quienes son nacidos de la semilla del hombre: ellos pueden o no pueden llamar Dios, “Padre.”

Jesus dijo, “No todos quienes me llaman Señor, Señor entrarán al reino de los cielos pero sólo el que hace la voluntad de mi Padre en el cielo” (Mt 7:21). Él también dijo que “uno no puede entrar al reino de los cielos si uno no es nacido del agua y del espíritu” (Jn 3:1-7). El ha instruído para que nazcamos del agua y del espíritu porque personas no fueron nacidas por el agua y espíritu. Agua es la semilla de Dios, la palabra de Dios, y el espíritu es el espíritu de Dios.

Jesús dice en Mt 13:24-30 que dos semillas fueron sembradas en el campo de Jesús (iglesia). Durante la cosecha, el fruto de la buena semilla son cosechados mientras los quienes no son cosechados son quemados en fuego. ¿Quién recibe salvación? El que es nacido con la semilla de Dios y es cosechado.

Como está escrito en Apocalipsis 7, las 12 tribus del nuevo reino de Dios son creados a través de los quienes son sellados. ¿Será que habrá salvación a los quienes no están sellados y los quienes no pertenecen a las 12 tribus?

También está escrito en Apocalipsis 22:18-19 si cualquiera añade o quita de Apocalipsis, el no podrá entrar al cielo y recibirá maldiciones (plagas). ¿Será que cualquiera recibira salvación añadiendo y quitando de la palabra de Apocalipsis?

Jesús dice que cualquiera quien entra al reino de los Cielos de Dios debe de tener su nombre escrito en el libro de la vida (Ap21:27). ¿Será que cualquiera podra obtener la salvación cuando su nombre no está escrito en el libro de la vida?

Jesús promete en Apocalipsis 2-3 que va dar las 12 bendiciones al quien venciere. ¿Será que uno puede decir que uno haya recibido las 12 bendiciones en Apocalipsis 2-3 sin vencer cualquiera cosa? ¿Será que puede haber salvación sin las 12 bendiciones?
¿Las personas que añadieron y quitaron de la palabra tiene el derecho de llamar a otros un culto? ¿Como son ellos diferentes de los pastores falsos durante la primera venida de Jesús?

Jesús dijo, “Muchos dirán a mí en ese día, Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre sacamos demonios e hicimos milagros? ” Entonces yo les diré plenamente, Yo nunca los conocí, ¡apártense de mí, hacedores de maldad! (Mt 7:21-23). ¿Usted cree en estas palabras?

Más de querer y percibir en la voluntad de Dios y vivir una fe de acuerdo a Su voluntad, personas creen en sus propios pensamientos, propia justicia, y en las palabras de sus pastores y en su autoridad porque ellos no saben la voluntad en la Biblia. Esto no puede ser un verdadera vida de fe.

Como hemos visto previamente, el falso profeta (pastores) sacaron demonios en el nombre del Señor y ejercitaron sus poderes como profetas en el nombre del Señor, pero Jesús los vio como personas actuando sin leyes y les dijo que los dejará. Es porque sus acciones no fueron hechas de acuerdo a la voluntad de Dios. Tristemente los miembros de la iglesia quienes siguen estos pastores los consideran como personas muy notables. ¿Donde será que los pastores y miembros de la iglesia irán? Ciertamente será en el infierno, porque ellos actuaron sin leyes (Mt 7:23, Jn 12:48, Ap 20:12-15).

Personas no reciben salvación o pueden ser hijos de Dios solo porque son pastores, por ejercitar su poder eclesiástica, por sacando demonios, sirviendo fielmente, por dando ofrendas, por tener una asistencia perfecta en la iglesia, por evangelizar a muchos, y por hacer muchas cosas buenas a otros.

La verdadera  voluntad es que seamos nacidos por la semilla de Dios y unirnos con el espíritu de Dios, ser cosechados, y ser sellados (con la palabra de Dios), ser parte de las 12 tribus de la nación prometida, no añadir ni quitar de Apocalipsis, y ser escritos en el libro de la vida. Cualquiera debe de tener estas palabras cumplidas en sus vidas y ser creados de esta manera.

Para decirle a alguien que no cumple con cualquiera de los anteriores, “Usted no puede ir al cielo, no puede recibir la salvación, ” los va a ofender. Es verdad, sin embargo, no van a poder recibir la salvación. Ellos no pueden recibir la salvación a través de la denominación o religión, título y autoridad. Solo por ser re nacidos con la semilla de Dios y el espíritu cualquiera puede recibir la salvación (Jn 3:5). Sólo aquel a quien las promesas del Nuevo Testamento cumplidas y son creadas de acuerdo pueden ser la nueva creación y la persona del cielo quien es nacida.

La Biblia hace conocer de la vida de fe reconocida por Dios y la vida de fe que no es reconocida por Dios. Por eso, uno debe de preguntarse, “¿Quién soy yo de acuerdo al Nuevo Testamento en la Biblia? Será que fui re nacido de acuerdo de las promesas? ¿Será que fui re creado de acuerdo de las promesas? ” Cada persona debe de pararse enfrente de la Biblia y preguntarse a uno mismo estas preguntas. Ellos sabrán las respuestas. ¡Amén!

Referencia: http://cafe.daum.net/scjschool/E3qZ/627